Hoces del río Duratón.

Ya había estado allí un par de veces, tanto en la Ermita de San Frutos como en Sepúlveda, el pueblo más conocido de la zona.

Aprovechando que durante este puente vendría un amigo, Carlos Rossi, decidí llevarlo allí debido a la belleza del pueblo y ante la posibilidad de ver a poca distancia las aves allí presentes, en especial los buitres leonados.

Buitre leonado.

Alimoche.

Y aunque los metereólogos y el día amenzaban con lluvia, granizo, frío y viento, decidimos ir hasta allí igualmente. Y tal como predijeron el tiempo, así fue, aunque algún claro nos daba una pequeña tregua.

 Eso sí, tengo que agradecer al mal tiempo que consiguiera ver aquello como nunca antes. Estaba lejos a lo que siempre me ha parecido una romería de gente yendo a la ermita.

Justo antes de irnos de las Hoces, nos despidió el último rayo de sol del día, ya que mientras comíamos llegó la esperada nube de frío, lluvia y granizo que cubrió de blanco los campos. Por ello, no pudimos ver en condiciones el pueblo ni bajar al río. Nos quedamos con las ganas, pero ya se volverá.

Antes de regresar a Madrid decidimos hacer una última parada. Se trataba de visitar el castillo de Manzanares el Real, posiblemente el más bonito de la comunidad. Totalmente recomendable ir hasta allí, y si hace buen tiempo, a La Pedriza.

P.D: como siempre, agradecerle a Carlos el par de fotos de aves que me ha prestado.