Las personas que me conocen directamente, o que son seguidores de este blog desde hace un tiempo, sabrán a qué me quiero dedicar en un futuro (si se puede y me dejan).
Ser veterinario es vocacional, se lleva en la sangre, y aunque estemos de vacaciones, no se olvida. Así que en mis salidas, además de fotografiar a los animales salvajes también me detengo ante los animales de "granja", y si el fondo acompaña, hacer unas cuantas fotografías. Y tras las fotografías, uno se hace algunas preguntas como qué raza será (para no caiga en el olvido la etnología y para que los ganaderos no se rían de nosotros al no diferenciar una "churra de una merina"), y posteriormente, buscarles alguna que otra enfermedad (aunque en realidad estén sanas sanísimas).
En Asturias, de donde son todas estas fotografías, no es nada difícil poder ver vacas con sus toros, yeguas con sus potros, gallinas, alguna ovejilla, bien en algún prado cercado, o bien en la montaña prácticamente libres.
Pero tampoco es complicado ver a gente que se dedica a molestar a los animales, o que incluso ponen en peligro su propia integridad física y la de los animales para hacerse "una fotografía con la vaquita asturiana, ya verás cuando se la enseñe a mi mami y la ponga en el Facebook".
No hay que olvidar una cosa muy sencilla: el respeto (que no miedo) que se debe tener hacia estos animales, normalmente mansos, pero también impredecibles. Como nos pasó con esta yegua, que sin ser molestada en ningún momento, nos siguió durante un buen trecho del sendero hasta conseguir echarnos del mismo.
Por último, y aunque en este caso se trate de un caballo en la ría de Villaviciosa, no debemos olvidar, generaciones presente y futura, que la labor de estos animales en el control de incendios es superior de lo que pensamos. Tal vez tendremos que echar un ojo al pasado para intentar solucionar los problemas del futuro.
Huy, de qué me sonarán a mí esos caballos, tal vez los vi en persona...
ResponderEliminarMenuda nos hizo pasar la yegua, y eso que no hicimos nada como tú dices y encima nos estábamos alejando más que de sobra.
Y alguna vaca también te sonará, seguro que de habértela comido, je, je.
EliminarTotalmente de acuerdo!!
ResponderEliminarUna gran entrada, futuro Vet!! :P